HISTORIA DEL CIRCO MODERNO / Conmemoración del 250 aniversario del circo moderno 1768-2018

Exposición
Finalizado

Fecha

Del 5 al 28 de abril de 2018

Horario

De lunes a sábado, de 10 a 14 y de 17 a 20 h.

Lugar: Sala de Exposiciones "La Lonja". Centro Cultural Casa del Reloj. Paseo de la Chopera, 10.

 

 

Visita guiada: el sábado 21 de abril, a las 11.30 h., con Pepe Palacio y Javier Jiménez

 

Conmemoración del 250 Aniversario del Circo Moderno y Celebración del Día Mundial del Circo.

Inauguración el 4 de abril a las 17.30 h.
Visita guiada el sábado 21 de abril, a las 11.30
h., con Pepe Palacio y Javier Jiménez

Organiza: MADPAC y UPAAC
Coordinación: Pepe Palacio y Javier Jiménez
Texto: Javier Jiménez
Material cedido por la UPAAC (Unión de Profesionales y Amigos de las Artes Circenses)

Aprovechando la celebración del 250 Aniversario de la creación del Circo Moderno, esta exposición quiere ser una reivindicación del Circo como un Arte en continua evolución, un Arte que desafía las leyes de la gravedad y las de la lógica, un Arte popular que emociona y asombra, un Arte que, hoy en día, es una de las artes escénicas más innovadora y vanguardista, un Arte, en definitiva, que quiere ser protagonista de la escena en este siglo XXI que acaba de comenzar.

La exposición es una muestra del gran universo circense dividida en cuatro bloques: carteles del Price del siglo XIX, carteles de cine con sabor circense, payasos españoles del siglo XX y recuerdos de la pista y sus artistas. Una pequeña muestra de lo que el Circo es capaz.

La exposición se divide en cuatro secciones:

CARTELES DEL CIRCO DE PRICE EN EL SIGLO XIX

Gracias al trabajo de la Biblioteca Nacional de España podemos disfrutar de esta magnífica colección de reproducciones de carteles del siglo XIX del Circo de Price. Estos carteles formaron parte de la fascinante exposición Memoria de la Seducción organizada por la BNE en 2002.

Con esta muestra queremos reivindicar el sonoro y castizo PRICE —suena como se escribe—,  que españoliza el apellido del jinete emprendedor, el irlandés Thomas Price que tuvo la maravillosa idea de levantar un circo estable en la ciudad de Madrid. Este apellido, despojado de su versión más economicista, trajo suerte a la ciudad —y al mundillo circense y de la farándula en general— y se convirtió con el tiempo, gracias a su popularidad y nivel artístico, en parte intrínseca de la cultura y memoria de Madrid.

Los carteles dan cuenta —son como libros, son carteles para leer— de muchas hazañas acrobáticas y proezas atléticas. También nos ayudan a rescatar del olvido nombres y apellidos de artistas de lustre circense, como si de carteles de corridas de toros se tratase. Nos ayudan a imaginar números de circo que se balancean entre la exageración y el riesgo y la emoción real. Nos transportan a lugares exóticos, ¡incluso a la luna!, como también nos transportan a un siglo donde la maravilla y el asombro todavía tenían valor.

CINE Y CIRCO

Desde siempre  el circo ha sido un lugar común de inspiración para artistas de toda índole. Escritores, poetas, pensadores, pintores, escenógrafos, compositores, escultores, etc., han encontrado en el circo el imaginario de su inquietud artística y el contenedor de mil historias aún por contar. El cine es el mejor ejemplo de esta apasionada relación —los feriantes y empresarios circenses fueron los primeros en explotar las bondades del cine—, contándose por cientos las películas relacionadas con el circo.

Celos en el trapecio, la respiración se contiene, suspense por todo lo alto; ventrílocuos que enloquecen cada vez que se contestan a si mismos; equilibristas, poetas del deseo y el riesgo; monstruos y fenómenos varios compartiendo lona y lunas; amores que se descubren en la intimidad de una caravana y que se agotan durante el viaje; payasos que no dejan de reír y cantar siempre la misma triste canción.  Las ferias y los circos son el escenario perfecto para cualquier historia porque en ellos puede suceder siempre lo imprevisible.

PAYASOS ESPAÑOLES DEL SIGLO XX

Los payasos españoles siempre han sido muy solicitados en las pistas de circo internacionales. Será por nuestro natural desparpajo, nuestra cercanía con lo ridículo o por nuestro marcado y divertido acento al hablar otros idiomas, pero el caso es que los payasos españoles —madrileños muchos de ellos—  pisan, todavía hoy, con seguridad y mucha gracia las pistas y escenarios de todo el mundo.

Nombre míticos de la historia clownesca, como Boum Boum, Antonet, Tony Grice y Marcelino, dejan su herencia de risas y aplausos a la familia Rivel, Pompoff y Thedy, Ramper, Eduardini, Los Rudi Llata, Popey, la familia Díez, la familia Aragón… Dinastías de la risa, payasos musicales o del verbo ácido y absurdo, familias empeñadas en perpetuar el reinado de los zapatones y la nariz roja.

RECUERDOS

La gente de circo siempre ha sido y es un poco fetichista. Diógenes tendría, hoy, alma de acróbata. Los cirqueros atesoran recuerdos y coleccionan artefactos oxidados por el tiempo y la nostalgia. Vestuarios, instrumentos, programas de mano, carteles, fotografías y demás parafernalia se deterioran en baúles habitados por termitas en espera de un museo que vuelva a sacar brillo a la aventura de una vida dedicada al circo.

Mirador Arganzuela es un programa de innovación en cultura de proximidad de la Junta de Arganzuela donde el tejido social, los espacios y centros culturales del distrito colaboran con Intermediae/Matadero Madrid para desarrollar la agenda cultural de Arganzuela.